El primer viaje con fulanito (día 3)
El fulanito despertó muy temprano, dormía en una cunita que nos prestaron en el hotel, su diversión era agarrarse de los barrotes y jalarse. A diferencia del día anterior, nos levantamos temprano y llevamos al fulanito al mar. No puedo decir que le gustara pero sí le llamó mucho la atención el ruido que hacían las olas y contrario a lo que pensamos no se comió la arena, está no le gustó mucho y subía sus piecitos en cuanto la sentía.
Ya más entrado el día, el fulanito tuvo su primer encuentro otoñal con una huésped del hotel, una señora que muere por ser abuela pero, según nos dijo, sus hijos no se animan. Nos pidió cargar al fulanito y éste bien comodino se quedo recostado agustísimo con su "amor otoñal" quien no lo soltó ni un momento. En lo que el chamaquito estaba con su conquista y su Má se preparaba para ir a la alberca yo aproveché para echarme otra nadada, así que le avisé a Má y ni tarde ni perezosa la conquista del chamaco le dijo a Má: si quieres vete con él, yo se los cuido, con confianza… (¡Ajá! ¿En verdad creyó que íbamos a dejarle a nuestro fulano?) Su Má y yo no supimos que decirle pero por supuesto que no dejamos ni un momento al fulanito…Todo este día y el siguiente nos encontramos a al "amor otoñal" del chamaco, quien se deshacía en piropos y cariños para él, pero nosotros no soltamos para nada!
La tarde de éste tercer día avanzó sin novedad, más paseos por el mar, tomada de fotos y video y el fulanito seguía durmiéndose en cuanto sentía algo de movimiento y calorcito cuando lo cargaba…
No hay comentarios:
Publicar un comentario